A medida que las tensas elecciones en el sistema político dividido de Estados Unidos se acercan, es posible que las plataformas de redes sociales no estén preparadas para la avalancha de rumores virales y falsedades que podrían interrumpir el proceso de votación, un elemento constante de las elecciones en la era de la desinformación. Los principales problemas que estas empresas tecnológicas deben enfrentar están relacionados con la confianza en las elecciones y la información que las personas encuentran en las redes sociales.
Existe la creciente creencia de que las elecciones de 2020 fueron fraudulentas, con más de un tercio de los estadounidenses creyendo que la victoria de Joe Biden no fue legítima. La campaña de desinformación, principalmente liderada por Donald Trump y sus aliados en plataformas de redes sociales tanto mainstream como de extrema derecha, ha contribuido a la erosión de la confianza en las elecciones.
Algunas empresas, como Meta (anteriormente Facebook) y YouTube, han cambiado sus políticas para permitir la difusión de desinformación relacionada con las elecciones en 2020. Otros aún son relativamente nuevos y están en proceso de formular sus reglas de contenido político a medida que se desarrollan. TikTok, bajo la mira del gobierno de Estados Unidos, ha buscado mantenerse alejado del contenido político a favor del entretenimiento. Algunas plataformas más pequeñas, como Truth Social Trumpa y Telegram, se han diseñado específicamente sin moderación de contenido, lo que permite que los rumores crezcan y eventualmente se propaguen a las redes sociales más populares.
Vale la pena señalar que las plataformas pueden tener dificultades para mantener un número adecuado de empleados, especialmente después de las reducciones de personal en los equipos de confianza y seguridad. Con un año electoral extenso para las democracias de todo el mundo, la cantidad de desinformación que circula en Estados Unidos e internacionalmente puede ser difícil de manejar. Las elecciones en otros países son probablemente más susceptibles a la influencia de la desinformación, ya que la mayoría de los recursos se dedican a las elecciones de Estados Unidos y se llevan a cabo en inglés.
Las herramientas de inteligencia artificial solo pueden exacerbar este problema. Ya se ha demostrado que las grabaciones de audio falsas que impersonan a Joe Biden y que instan a los votantes de New Hampshire a quedarse en casa pueden alimentar la desinformación política. La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) anunció una prohibición del uso de voces generadas por IA en llamadas automatizadas el 8 de febrero para abordar las tecnologías emergentes.
También vale la pena señalar que X platform, anteriormente conocida como Twitter, bajo el liderazgo de Elon Musk, ha cambiado completamente su filosofía. Después de reducir el personal en el departamento de confianza y seguridad, la plataforma ha discontinuado sus herramientas para etiquetar posibles desinformaciones, dependiendo cada vez más de «notas de la comunidad» donde los lectores pueden agregar contexto o afirmaciones contradictorias en lugar de una verificación oficial de Twitter. Musk ha restablecido cuentas previamente bloqueadas, algunas de las cuales estaban asociadas con la propagación de desinformación relacionada con las elecciones.
Las herramientas de verificación de hechos u otras medidas que dificultan la difusión de desinformación ayudan a las personas a verificar qué es verdadero y qué no. Estas herramientas no cambiarán las opiniones de las personas que están arraigadas en sus creencias políticas, pero pueden ayudar al lector promedio a comprender el contexto. Las personas que no desean buscar la verdad nunca la encontrarán, y no hay mucho que podamos hacer al respecto. Debemos tener estas conversaciones individualmente con nuestros amigos y familiares cuando nos demos cuenta de que han caído en la madriguera de QAnon.
También es importante tener en cuenta que los investigadores enfrentarán dificultades para rastrear y etiquetar la desinformación este año debido a la reducción de información proporcionada por las empresas tecnológicas con respecto a la moderación de contenido político. Actualmente, miembros conservadores del Congreso, liderados por el Representante Jim Jordan, están investigando las plataformas y sus conexiones con el gobierno y los investigadores de desinformación en un intento de demostrar la supresión de las opiniones conservadoras.
En conclusión, las próximas elecciones plantean muchos desafíos para las redes sociales y la lucha contra la desinformación. Las empresas tecnológicas deben tomar medidas para gestionar eficazmente la desinformación, especialmente en un contexto político. Las herramientas de inteligencia artificial pueden ayudar a combatir la información falsa, pero también son necesarias discusiones más amplias sobre el papel de las redes sociales en la democracia. Sin embargo, la responsabilidad final recae principalmente en las personas, quienes deben evaluar críticamente la información y buscar la verdad de manera independiente, sin importar lo que vean en las redes sociales.
Preguntas frecuentes (FAQs):
1. ¿Con qué desafíos deben enfrentarse las empresas tecnológicas en el contexto de las elecciones de Estados Unidos?
Las empresas tecnológicas deben abordar los problemas de confianza en las elecciones y la difusión de desinformación en las redes sociales.
2. ¿Qué impacto ha tenido la campaña de desinformación liderada por Donald Trump en la confianza en las elecciones de Estados Unidos?
La campaña de desinformación ha contribuido al creciente desconfío en las elecciones, con más de un tercio de los estadounidenses que no consideran legítima la victoria de Joe Biden.
3. ¿Qué plataformas han cambiado sus políticas con respecto al contenido político?
Ejemplos incluyen Meta (anteriormente Facebook) y YouTube, que han modificado sus políticas para permitir la difusión de desinformación relacionada con las elecciones. TikTok, por otro lado, ha tratado de mantenerse al margen del contenido político a favor del entretenimiento.
4. ¿Por qué plataformas más pequeñas como Truth Social Trumpa y Telegram fomentan el crecimiento de la desinformación?
Estas plataformas han sido diseñadas sin moderación de contenido, lo que permite que la desinformación se propague y eventualmente llegue a las redes sociales más populares.
5. ¿Qué herramientas pueden ayudar en la lucha contra la desinformación?
Herramientas como la verificación de hechos y medidas que dificultan la difusión de desinformación pueden ayudar a las personas a verificar la veracidad de la información y comprender su contexto.
6. ¿Qué problema plantea la reducción de información proporcionada por las empresas tecnológicas con respecto a la moderación de contenido político?
La reducción de información dificulta que los investigadores puedan rastrear y etiquetar la desinformación, especialmente para los miembros conservadores del Congreso que están investigando las plataformas en un intento de demostrar la supresión de las opiniones conservadoras.
7. ¿Qué acciones deberían tomar las empresas tecnológicas en la gestión de la desinformación?
Las empresas tecnológicas deben tomar medidas efectivas para gestionar la desinformación, especialmente en un contexto político. Las herramientas de inteligencia artificial pueden ser útiles, pero también se necesitan discusiones más amplias sobre el papel de las redes sociales en la democracia.
8. ¿Quién tiene la responsabilidad principal en la lucha contra la desinformación?
La responsabilidad principal recae principalmente en las personas, quienes deben evaluar críticamente la información y buscar la verdad de manera independiente, sin importar lo que vean en las redes sociales.
Definiciones de términos clave y jerga utilizada en el artículo:
– Redes sociales: Plataformas de Internet como Facebook, Twitter, Instagram, etc., que permiten a los usuarios publicar, compartir y comentar contenido.
– Desinformación: Difusión deliberada de información falsa o distorsionada con el objetivo de engañar o manipular a las personas.
– Contenido político: Contenido relacionado con política, elecciones, partidos políticos, candidatos, asuntos públicos, etc.
– Moderación de contenido: Proceso de eliminación, edición o etiquetado.
The source of the article is from the blog bitperfect.pe