La NASA, la agencia espacial estadounidense, lidera el Proyecto de Energía Superficial por Fisión como parte del programa Artemis, con el objetivo de proporcionar energía para futuras bases lunares. En este proyecto, la agencia ha encargado a tres socios comerciales: Lockheed Martin, Westinghouse e IX, el desarrollo de un diseño de reactor nuclear para generar electricidad en la superficie de la Luna.
Cada socio fue responsable de desarrollar el diseño del reactor y los sistemas de conversión de energía, disipación de calor, gestión de energía y distribución. También era importante proporcionar estimaciones de costos para los sistemas y planes para su desarrollo. El objetivo del proyecto era crear un sistema que pudiera sustentar bases lunares durante décadas y servir como base para sistemas similares en Marte.
Los sistemas de energía son cruciales para el éxito de cualquier misión espacial. Para la Luna y Marte, son la diferencia entre la vida y la muerte. La energía nuclear es el camino más probable para satisfacer las necesidades energéticas a largo plazo.
Según Trudy Kortes, la gerente del programa en la NASA, «demostrar la energía nuclear en la Luna es necesario para mostrar que es una opción segura, limpia y confiable». Un reactor nuclear, que funciona independientemente del Sol, es un elemento clave para las actividades de exploración a largo plazo en la Luna.
¿Por qué reactores nucleares? La vida y el trabajo en la Luna presentan muchos desafíos para los científicos y astronautas. Una fuente de energía segura y limpia ayuda a superar muchos de los peligros a los que se enfrentarán. La energía solar es una fuente de energía confiable que puede mantener muchos sistemas en funcionamiento.
Sin embargo, al menos la mitad del tiempo, los paneles solares estarán en la oscuridad durante la noche lunar. Por eso es crucial tener una fuente de energía alternativa. Aquí es donde entran en juego los reactores nucleares.
La NASA y otras agencias espaciales pueden colocar reactores nucleares en lugares que están parcial o totalmente sombreados. En muchos casos, también hay recursos de hielo disponibles.
La principal ventaja de los reactores nucleares es que pueden operar de manera continua, independientemente de la presencia de luz solar. Esta es una ventaja significativa cuando se trata de proporcionar energía durante la noche lunar de 14 días.
Cabe destacar que la NASA no dice que solo se utilizarán generadores nucleares en la Luna. Lo más probable es que la energía eléctrica para las bases y laboratorios científicos se suministre a través de una combinación de instalaciones solares y reactores nucleares.
Los requisitos del proyecto del reactor establecen que debe pesar menos de 6 toneladas y generar 40 kilovatios de energía. Esto es suficiente para demostrar las capacidades del sistema y alimentar bases, redes eléctricas y experimentos científicos. Un reactor similar en la Tierra sería suficiente para abastecer de energía a 33 hogares.
La agencia diseñó los requisitos para que fueran abiertos y flexibles, para que cada empresa pudiera innovar y proponer soluciones novedosas en sus diseños.
Ahora, después de recibir comentarios de los socios comerciales, la NASA avanza con la segunda fase del proyecto, prevista para 2025. Posteriormente, la agencia espera entregar el sistema para su uso en la Luna a principios de la década de 2030. En un futuro lejano, después de demostrar su valía en la Luna, es probable que la NASA desarrolle un reactor nuclear especializado para su uso en Marte.
Preguntas frecuentes:
1. ¿Cuál es el objetivo del Proyecto de Energía Superficial por Fisión de la NASA?
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